Hola gente, soy Verónica. Quiteña de nacimiento (y de dirección domiciliaria) y de corazón americano (3américas).
Vivo en el área rural de mi ciudad por lo que me despierto con el trinar de cientos de pájaros para calentar comidita a mis hijas antes de que partan a su escuela (PachaMama) y junto a Danilo (mi esposo por 10 años y 20 de amistad eterna), discernir el día que nos corresponde. Ahora, él está desempleado y nuestra casa se llena de su mano creativa y organizada.
Trabajo diariamente en el seguimiento-acompañamiento a un grupo diverso en las Américas; vía internet. Visito a estas comunidades periódicamente para nutrirnos mutuamente del crecimiento en proyectos sociales basados en una creencia de la hermandad entre todos y todas, y con la creación. Somos un grupo Franciscano, sin restricción de credo, edad o condición de género o social.
Mi formación se amalgama desde el campo de la Informática, la Comunicación Social, la Gestión de Entornos Virtuales de Aprendizaje y la praxis como Misionera desde hace 20 años atrás.
Cuando surge una oportunidad, adoro bailar salsa, asistir a una buena obra de teatro o concierto musical… Pero en la rutina cocino, barro, lavo… ja ja ja y juego con mis niñas (8 y 6 años casi) de mil colores 🙂
Creo en educaciones alternativas para chic@s y grandes, desde el pilar de lo afectivo.