Por: Héctor Rojas (México), después de una entrevista con Herman Van deVelde (agosto 2012)

El enfoque educativo por competencias que se desarrolla en casi todo el mundo responde a un sistema de mercado que no propicia el desarrollo individual ni social de las personas, aseguró Herman Van de Velde Estelí, coordinador del proyecto ‘Aprendizajes Basados en Actitudes Cooperativas en Red’ (ÁBACOenRed).

Conceptos primigenios de generación de conocimiento como el de Ubuntu, el cual impulsa el sentido esencial del hombre -“Soy porque somos”- han sido pasadas por alto, aseguró el académico, quien impulsa con su proyecto el desarrollo de la educación cooperativa como enfoque que permita obtener el desarrollo sustentable de las naciones latinoamericanas.

La responsabilidad de la educación no es la de crear personas que repliquen las normas de un sistema establecido en un modelo competitivo, sino la de tener un papel activo en la transformación social, para lo cual se requiere que las comunidades escolares sean espacios abiertos al cambio y a la búsqueda del desarrollo de manera colectiva, reconoció en entrevista el investigador de origen belga, Van de Velde, quien desde hace tres décadas trabaja en el sector educativo de Nicaragua.

A nivel internacional, la investigadora estadounidense especialista en Educación para la Paz, Betty Reardonse, así como Luis Solari, ex primer ministro de Perú, quienes coinciden en que, de acuerdo con las características históricas de la región latinoamericana, los aprendizajescolaborativos como la educación humanista son propicias para apreciar la riqueza cultural de la región.

Hay muchas experiencias en América Latina que apuntan hacia una educación diferente a las exigencias de mercado, en ese sentido la película La educación prohibida (película-documental sudamericana que se estrenará el día de hoy), es uno de estos ejemplos que destacan en la región, aseguróHernán Van de Velde.

El coordinador de ABACOenRed también destacó del modelo de Cooperación Genuina cinco puntos para que éste pueda desarrollarse: 1) El arte de escuchar (estar abierto al otro); 2) Habilidad de interpretar (serempático y creativo); 3) Voluntad de compartir; 4) Decisión por el compromiso y; 5) Visión de integración.

De acuerdo con la investigadora Rocío A. Andrade, la educación por competencias tiene una breve historia en el Sistema de Educativo Nacional (SEN). Fue en 2004 cuando el Programa de Educación Preescolar instaló el enfoque de las competencias en su normatividad, instaurando así la puerta de entrada a la Educación Básica por competencias.

Para 2006 se aprobaron las competencias comunicativas en el área de Español y luego la Reforma de la Educación Secundaria.

El enfoque por competencias en nuestro país buscó su consolidación en 2008 con la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE) la cual destaca “la formación integral de los alumnos para la vida y el trabajo” a través del impulso a la reforma curricular “orientada al desarrollo de competencias y habilidades”.

Sin embargo, el antecedente más cercano del enfoque por competencias apareció en México a fines de los años sesenta en la formación laboral; su interés, según Díaz Barriga y Marco Antonio Rigo, en su libro Formación docente y Educación Basada en Competencias, era “vincular al sector productivo con la escuela, especialmente con los niveles profesional y la preparación para el empleo”.

A pesar de todo, para Herman Van de Velde las personas son derivados histórico-culturales y, para que el individuo encuentre un desarrollo integral, requiere de un desarrollo a la par de la colectividad. “Ubuntu, soy porque somos”, señaló.

Si no hay competencia no hay rival ni disputa; si hay colaboración la tendencia es el desarrollo integral, concluyó Van de Velde.